Lanzados por las escaleras y vejados: la violencia de los 46 policías del 1-O en Catalunya que ha quedado amnistiada (vídeo)

Los cuarenta y seis agentes de la policía española procesados ​​por las agresiones a los votantes del Primero de Octubre en Catalunya han sido amnistiados. Entre los hechos amnistiados, se encuentran las agresiones a las escuelas Mediterránea, Dolors Monserdà, Ramon Llull y Pau Claris de Barcelona. Entre las más mediáticas, se encuentra la agresión a Marta Torrecillas (dos agentes la agredieron, le retorcieron los dedos de ambas manos y la arrastraron escaleras abajo), la agresión con una patada voladora o el hecho de arrastrar votantes escaleras abajo.

El titular del juzgado de instrucción 7 de Barcelona, ​​Francesc Miralles, ha extinguido su responsabilidad penal al considerar que estas agresiones son amparadas por la ley de amnistía, que recoge las acciones policiales que no constituyan torturas o tratos degradantes y que no hayan superado un umbral mínimo de gravedad.

El juez instructor Francisco Miralles, que finalmente ha aplicado la amnistía, describía así la violencia: “[En el CEIP Ramon Llull] NBD manifiesta que el día de los hechos un agente la cogió del cuello, la lanzó y cabeceó contra tierra […]. Sufrió un traumatismo craneoencefálico, una cervicalgia post-traumática y una contusión en el hombro izquierdo.” Más: “HAB estaba en el interior del centro escolar y un agente le dijo ‘habla normal, cerdo de mierda’, y le propinó un collejo; cuando fue voluntariamente a la salida, un agente le empujó contra un grupo de tres o cuatro agentes más, le estiró el pelo, lo inmovilizaron y el agente XXXX le propinó una patada en el esternón.” Más: “LLL manifiesta que el día de los hechos estaba sentada en el suelo cuando, sin decir nada, los agentes la golpearon con la defensa [la porra]. Más tarde, un agente le estiró el pelo y la empujó fuera del grupo en el que se encontraba, y recibió golpes en las costillas y en los brazos y golpes con los escudos.”

En el caso de Torrecillas, que no sólo sufrió la violencia policial, sino también una campaña de acoso instigada por medios y partidos españoles, el juez decía: “MTD manifiesta que el día de los hechos un agente la cogió de la mano derecha y la arrojó al suelo con violencia, la cogió otro agente, le retorcieron un dedo y la arrojaron escaleras abajo. Una vez allí, un agente le retorció los dedos de la mano uno por uno, y después la cogieron de los senos”. Con la aplicación de la ley, toda la violencia de estas agresiones quedará impune.

“Las actuaciones investigadas fueron de duración individual escasa, enmarcadas en un objetivo policiaco definido, y no continuaron cuando se logró”, dice la resolución. “Ningún hecho superó la gravedad necesaria para ser excluido”, añade. También dice que los delitos de lesiones que podrían llegar a ser castigados con penas de hasta cinco años de prisión son amnistiables según la ley. En ese caso, son delitos contra la integridad moral no superiores a cuatro años de cárcel.

Esta resolución llega después de seis años y medio de una larga y complicada investigación contra los agentes, obstaculizada continuamente por la fiscalía. El juez había logrado mantener las acusaciones contra los agentes y llevarlos a las puertas del juicio. Pero ahora la ley de amnistía le obliga a extinguir su responsabilidad penal. Habrá que ver qué ocurrirá con los agentes que cometieron agresiones graves, como el encausado por el caso de Roger Español. La amnistía sí excluye los delitos de este tipo que superen un umbral de gravedad mínimo.

Fuente: Vilaweb.