Primeira Linha: Día da Galiza Combatente. Sólo en las calles derrotaremos al PP

Comunicado de la organización de la izquierda independentista gallega Primeira Linha (Primera Línea) con motivo del 11 de Octubre, elDía da Galiza Combatente (Día de la Galicia Combatiente)

(Bilíngue galego / castellano)

En castellano

Día de la Galicia combatiente: Sólo en las calles derrotaremos al PP

La victoria electoral del PP en las elecciones autonómicas de hace unos días y el posterior golpe de estado mediático del establishment contra el secretario general del PSOE y su camarilla para así facilitar la investidura de un nuevo gobierno bandido de Mariano Rajoi, constata de nuevo las insalvables limitaciones de la dictadura burguesa española.

El actual régimen es irreformable y el modelo en vigor pactado por el franquismo y el reformismo, sólo puede ser transformado por la vía revolucionaria.

Sin embargo, frente a la imposibilidad de cambiar los planes diseñados por el régimen postfranquista empleando exclusivamente las reglas de juego impuestas por el Capital pactista “izquierda” hegemónica de nuestro País, insiste en alimentar el ilusionismo electoral. Con esta práctica anestesia la capacidad inmensa de combate de la clase obrera y de la juventud abduciéndola en la viabilidad de batallas electorales imposibles de ganar.

El resultado de esta errónea estrategia promovida por las fuerzas reformistas [Marea/Podemos y BNG] tan sólo provoca más desmovilización y frustración entre el pueblo trabajador ante las falsas expectativas de cristalizar las promesas de poder derrotar en las urnas al PP.

En el último quinquenio la burguesía ha logrado canalizar por la esterilizante vía institucional el descontento con el régimen presente en amplios sectores de la clase obrera y del conjunto del pueblo trabajador, logrando así imponer en las calles y centros de trabajo la desmovilización y el fetichismo de la alternancia parlamentaria.

Ante este escenario tan frustrante para, cada vez, mayores sectores populares por la carencia de perspectivas de desalojar del poder al PP, la resignación y la frustración van a ser el caldo de cultivo del fascismo.

Las fuerzas políticas y sociales aparentemente situadas en los parámetros de la “izquierda” están hegemonizadas por la pequeña burguesía. Más allá del banal discurso que de forma oportunista empleen, del atractivo relato que utilicen, carecen de voluntad política y del más mínimo coraje para articular un movimiento obrero y popular socialista bajo una estrategia de liberación nacional orientado a la toma del poder.

Sólo pretenden regenerar el sistema, transitar del monopartidismo bicéfalo a un modelo donde se consolide un pluripartidismo que permita optar a gestionar las instituciones por las nuevas castas pequeño-burguesas.

Esta “izquierda” anémica no sólo renuncia realizar cambios de fondo. Actualmente optar por su implementación es simplemente imposible ante la desorganización, desmovilización y desarme ideológico de las masas.

El derrotismo y la impotencia política que arrastra su dirección anula cualquier posibilidad de generar un movimiento rupturista. La cobardía es una de sus característica genéticas.

No existe oportunidad alguna de alterar esta deficiencia y no pasa de una ingenuidad creer en el éxito de reformulaciones y/o refundaciones de lo actualmente existente. Apostar en esa dirección sólo conduce a atrasar la imprescindible necesidad de reconstruir el partido comunista revolucionario galego y una unidad popular dirigida por la clase obrera para organizar la lucha por nuestros derechos laborales y sociales, por las libertades y contra la represión incardinada en una estrategia por la soberanía, la independencia nacional y el socialismo.

Tenemos que asumir que nos encontramos bajo la más devastadora etapa de reflujo ideológico de las últimas décadas tanto en el ámbito nacional como a escala internacional.

Debemos interiorizar que este panorama no tiene modo alguno de cambiar a corto plazo. Que tenemos prácticamente que partir de cero. La reconstrucción del movimiento revolucionario galego e internacional exige huir de nostalgias, reclama abandonar las deformaciones del marxismo que arrastramos la práctica totalidad de las fuerzas que nos reclamamos seguidoras de sus ideales emancipadores.

Es apremiante volver a los orígenes, restaurar los fundamentos del anticapitalismo, recuperar el espíritu rebelde y antagónico que caracteriza el marxismo-leninismo.

La claudicación de prácticamente todos los partidos comunistas en armas, de las rebeliones populares de las últimas décadas buscando una rendición bajo el eufemismo de “acuerdos de paz” y reconciliciones nacionales, pero también la falsificación y desnaturalización de los modelos aún vigentes en diversas latitudes planetarias, exige una revisión en profundidad de lo que fueron los socialismos del siglo XX y de todas sus adulteradas expresiones implementadas en la primera década del actual siglo.

A las puertas de una nueva edición del Día da Galiza Combatente queremos rendir homenaje a la mejor tradición de combatividad de nuestra clase y de nuestro pueblo, reivindicar los capítulos más destacados de la Galiza que ni se vende ni se rinde.

Frente a la amnesia e impunidad impuesta por el régimen español y el sistema capitalista, frente a la criminalización que somete a las mejores hijas e hijos de Galiza, Primeira Linha reivindica su legado indeleble.

Sin el compromiso abnegado, el coraje y la determinación de Benigno Álvares, José Gomes Gaioso, O Piloto, Henriqueta Outeiro, Henrique Líster, Maria Araújo, Abelardo Colaço, Luís Soto, Moncho Reboiras, Lola Castro, José Vilar y tantas y tantos otros, nuestro pueblo y nuestra clase no tendrían futuro.

Tan solo en las calles y centros de trabajo y educación lograremos derrotar al PP, al Capital y al imperialismo español y de la UE pues la lucha es el único camino para la victoria.

 

Viva la Galiciaa Combatiente!

Viva la Revoluçom Galega!

Antes muert@s que escrav@s!

Patria Socialista o muerte! Venceremos!

 

En galego

Día da Galiza combatente. Só nas ruas derrotaremos o PP

A vitória eleitoral do PP nas eleiçons autonómicas de há uns dias e o posterior golpe de estado mediático do establishment contra o secretário geral do PSOE e a sua camarilha para assim facilitar a investidura de um novo governo bandido de Mariano Rajói, constata novamente as insalváveis limitaçons da ditadura burguesa espanhola.

O atual regime é irreformável e o modelo vigorante, pactuado polo franquismo e o reformismo, só pode ser transformado pola via revolucionária.

Porém, frente à impossibilidade de mudar os planos desenhados polo regime postfranquista empregando exclusivamente as regras de jogo impostas polo Capital, a pactista “esquerda” hegemónica do nosso País insiste em alimentar o ilusionismo eleitoral. Com esta prática anestesia a capacidade imensa de combate da classe operária e da juventude abduzindo-a na viavilidade de batalhas eleitorais impossíveis de ganhar.

O resultado desta errónea estrategia promovida polas forças reformistas [Marea/Podemos e BNG] só provoca mais desmobilizaçom e frustraçom entre o povo trabalhador perante as falsas expetativas de cristalizarem as promessas de poder derrotar nas urnas o PP.

No último quinquénio a burguesia tem logrado canalizar pola esterilizante via institucional o descontentamento com o regime presente em amplos setores da classe operária e do conjunto do povo trabalhador, logrando assim impor nas ruas e centros de trabalho a desmobilizaçom e o fetichismo da alternáncia parlamentar.

Perante este cenário tam frustrante para cada vez maiores setores populares pola carência de perspetivas de deslocar do poder ao PP, a resignaçom e a frustraçom vai ser o caldo de cultivo do fascismo.

A forças políticas e sociais aparentemente situadas nos parámetros da “esquerda” estám hegemonizdas pola pequena burguesia. Mais alá do banal discurso que de forma oportunista empreguem, do atrativo relato que utilizem, carecem de vontade política e da mais mínima coragem para articular um movimento operário e popular socialista sob umha estrategia de libertaçom nacional visado para a tomada do poder.

Só pretendem regenerar o sistema, transitar do monopartidarismo bicéfalo a um modelo onde se consolide um pluripartidarismo que permita optar a gerir as instituiçons polas novas castas pequeno-burguesas.

Esta “esquerda” anémica nom só renuncia a realizar mudanças de fundo. Atualmente optar a implementá-las é simplesmente impossível perante a desorganizaçom, desmobilizaçom e desarme ideológico das massas.

O derrotismo e a impotência política que arrasta a sua direçom goram qualquer possibilidade para gerar um movimento ruturista. A cobardia é umha das suas caraterísticas genéticas.

Nom existe oportunidade algumha de alterar esta deficiência e nom passa de umha ingenuidade acreditar no êxito de reformulaçons e/ou refundaçons do atualmente existente. Apostar nesta direçom só conduz a atrasar a imprescindível necessidade de reconstruir o partido comunista revolucionário galego e umha unidade popular dirigida pola classe obreira para organizar a luita polos nosos direitos laborais e sociais, polas liberdades e contra a represom, incardinada numha estratégia pola soberania, a independência nacional e o socialismo.

Temos que assumir que nos encontramos sob a mais devastadora etapa de refluxo ideológico das últimas décadas tanto no ámbito nacional como a escala internacional.

Devemos interiorizar que este panorama nom tem visos de mudar a curto prazo. Que temos praticamente que partir de zero. A reconstruçom do movimento revolucionário galego e internacional exige fugir de nostalgias, reclama abandonarmos as deformaçons do marxismo que arrastamos a prática totalidade das forças que nos reclamamos seguidoras dos seus ideais emencipadores.

Cumpre voltarmos às origens, restaurar o fundamentos do anticapitalismo, recuperar o espírito rebelde e antagónico que carateriza o marxismo-leninismo.

A claudicaçom de praticamente todos os partidos comunistas em armas, das rebelions populares das últimas décadas procurando umha rendiçom sob o eufemismo de “acordos de paz” e reconciliaçons nacionais, mas também a falsificaçom e desnaturalizaçom dos modelos ainda vigentes em diversas latitudes planetárias, exige umha revisom em profundidade do que fôrom os socialismos do século XX e de todas as suas adulteradas expressons implementadas na primeira década do atual século.

Às portas de umha nova ediçom do Dia da Galiza Combatente queremos rendir homenagem à melhor tradiçom de combatividade da nossa classe e do nosso povo, reivindicar os capítulos mais destacados da Galiza que nem se vende nem se rende.

Frente à amnésia e impunidade imposta polo regime espanhol e o sistema capitalista, frente à criminalizaçom a que submete as melhores filhas e filhos da Galiza, Primeira Linha reivindica o seu legado indelével.

Sem o compromisso abnegado, a coragem e a determinaçom de Benigno Álvares, José Gomes Gaioso, O Piloto, Henriqueta Outeiro, Henrique Líster, Maria Araújo, Abelardo Colaço, Luís Soto, Moncho Reboiras, Lola Castro, José Vilar e tantas e tantos outras, o nosso povo e a nossa classe nom teriam futuro.

Só nas ruas e centros de trabalho e ensino lograremos derrotar o PP, o Capital e o imperialismo espanhol e da UE pois a luita é o único caminho para a vitória.

 

Viva a Galiza Combatente!

Viva a Revoluçom Galega!

Denantes mort@s que escrav@s!

Pátria Socialista ou morte! Venceremos!

Francisco Campos

Francisco Campos

Nació en Sevilla en 21 de julio de 1958. Trabaja como administrativo. Es autor del libro "La Constitución andaluza de Antequera: su importancia y actualidad" (Hojas Monfíes, 2017).

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