Ucrania: la solidaridad llenó los bolsillos del gobierno de Zelenski

“La corrupción… toda la mierda que desaparece, el trato que reciben los extranjeros… si empiezo a hablar de esto, el ejército [ucraniano] se derrumbará con todas las investigaciones”. Son las declaraciones que hace Emise Fajk, una húngara de 30 años, actual directora de comunicaciones de la Legión Internacional de Defensa de Ucrania.

Emise se hizo conocida  por intentar estafar a un reality show en Australia en 2020, donde falsificó documentos bancarios y terminó siendo obligada a huir del país. Después de desaparecer durante unos años de repente aparece para ocupar un alto cargo dentro del ejército ucraniano.

Las declaraciones de Emise Fajk, son grabaciones obtenidas sin su consentimiento, fueron recogidas por Daily Mail Australia, que las difundió el pasado domingo. En ellas, Emise afirma estar en posesión de información sobre la corrupción que prevalece en las fuerzas armadas ucranianas: esta es la única forma, explica, de evitar ser despedida y deportada del país en guerra.

Informes de los Servicios de Seguridad de Ucrania (SBU) señalan a la húngara como una de los responsables del desvío de material militar y ayuda humanitaria por valor de varios millones de dólares. Sin embargo, Emise Fajk continúa desempeñando funciones sin restricciones.

Uno de los documentos advierte del riesgo de que la información en poder del director de comunicación de la Legión Internacional se haga pública: sería «catastróficamente mala en términos geopolíticos» y una «enorme victoria propagandística del enemigo».

Comunidad occidental tomada por sorpresa. Gobierno corrupto persiste en desfalco

Este martes se anunciaron las destituciones del fiscal general adjunto, Oleksii Simonenko, del viceministro de Políticas Sociales, Vitalii Muzichenko, de dos viceministros del Ministerio de Desarrollo de las Comunidades y Territorios, Ivan Lukeria y Viacheslav Negoda. Los gobernadores de las provincias de Dnipropetrovsk, Zaporizhia, Kiev, Sumi y Kherson también fueron víctimas del escándalo de corrupción que sacudió al Gobierno de Volodymyr Zelenski.

Esta ola de dimisiones se produce después de que el viceministro de Infraestructuras, Vasil Lozinskyi, fuera detenido por recibir un soborno de 367 mil euros. Mientras millones de ucranianos se congelaban debido a la falta de electricidad tras los ataques rusos a la infraestructura ucraniana, el gobierno compraba generadores a precios excesivos.

El Ministerio de Defensa, dirigido por Oleksii Reznikov, una de las figuras más importantes del régimen de Zelenski, también es blanco de sospechas, ya que su departamento fue responsable de la adquisición de raciones de combate a precios muy por encima de lo normal (326 millones de dólares).

El subjefe de la oficina presidencial, Kirilo Timoshenko, una de las figuras más cercanas a Zelenski desde su elección en 2019 y uno de los portavoces del Estado desde la invasión rusa, fue otra de las máximas figuras del gobierno en caer, dimitiendo antes de ser acusado de cualquier delito. Como medida preventiva, el presidente ucraniano se vio obligado a impedir la salida del país de todos los miembros del Gobierno, para evitar la huida de otros ministros y diputados.

Ucrania ocupa el puesto 122 (de 180 países) en el ranking organizado por Transparencia Internacional, el peor ranking de Europa.

Fuente: Abril Abril.