El “miedo a Vox”: la trampa del Régimen que quiere usar también el Partido Popular
El miedo a Vox, sin duda, está siendo utilizado como un elemento de estabilización del régimen del 78 a través de la concentración del voto en las opciones electorales del Régimen. Tras el tremendo malestar que la crisis capitalista de 2007 generó en amplias capas sociales en el Estado español, Podemos y después Ciudadanos se instituyeron en dos nuevos diques de contención para evitar cualquier tipo de cuestionamiento de los pilares del Estado español (la monarquía, la unidad del Estado y el modo de producción capitalista) y de sus lineamientos y servidumbres internacionales (a la OTAN, a la Unión Europea, al euro).
Ahora el “miedo a Vox” está jugando el mismo papel ante una mayoría social que se piensa de izquierda pero que está tan desarmada política e ideológicamente como para pensar que se puede cambiar algo cada cuatro años. Y hasta que es la única forma de “cambiar las cosas”.
Una pretendida “izquierda” entregada al menosmalismo (un término que acuñó el filósofo Javier Sádaba) que solo puede esperar vivir -en el mejor de los casos- con miedo el resto de sus días, y en el peor que sus miedos se hagan realidad y le pillen votando, en lugar de preparándose para enfrentar a la derecha extrema y a los ultras de Abascal. Ahora se debate entre el voto a Yolanda Díaz o, puestos a asegurarse, directamente al Pedro Sánchez. Tanto da.
Pues bien el PP también se sube a ese carro y afirma querer concentrar el voto de los indecisos e incluso de aquellos socialistas “descontentos” con Pedro Sánchez para que Alberto Núñez Feijóo consiga una mayoría suficiente y evite gobernar en coalición con Vox tras las elecciones estatales del 23 de julio.
Durante una entrevista en el informativo de 7TV Andalucía, el consejero de la Presidencia y una de las voces del PP andaluz, Antonio Sanz, ha declarado que el Estado español “necesita un gobierno sin ataduras”, sin la necesidad de que el PP meta en su gobierno al cavernícola Santiago Abascal.
Se trata de una estrategia parecida a la que utilizó Juanma Moreno en las elecciones andaluzas del 19 de junio de 2022: apelar al voto útil y evitar que, por aquel entonces, Macarena Olona entrara en el Palacio de San Telmo.
Aquella estrategia del PP le salió redonda al conseguir mayoría absoluta por primera vez en la historia de nuestro país. Ahora tanto PP como PSOE y SUMAR quieren repetir la misma jugada. El “miedo a Vox” de una “izquierda” que renuncia actuar y prepararse seriamente -y a todo lo demás que tradicionalmente hemos asociado a la izquierda- con tal de no sufrir el gobierno de unos seres salidos de las cavernas no augura nada bueno. Como mínimo, la continuidad del Régimen del 78 alguna legislatura más.
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