El Líbano es un enorme depósito de armas de la OTAN desde la operación Diluvio Al Aqsa

El Líbano también se ha transformado en un gran depósito de armas de la OTAN gracias a la guerra lanzada el 7 de octubre de 2023 por la operación “Inundación de Al Aqsa” liderada por el movimiento islamista palestino Hamás contra Israel, la primera incursión de tal magnitud en territorio israelí desde la Creación del Estado judío en 1948.

55 aviones militares de la OTAN aterrizaron en el Líbano entre el 8 y el 20 de octubre, el día después de la operación palestina, con el pretexto de reforzar la seguridad de las embajadas occidentales en el Líbano y preparar la evacuación de los nacionales occidentales de este país en caso de extensión al Líbano del conflicto entre Israel y Hamás.

32 aviones (entre ellos 9 estadounidenses, 9 holandeses y 9 británicos) aterrizaron en Hamate, en el norte del Líbano, y 23 en el anexo militar del aeropuerto de Beirut procedentes de Francia, Canadá, Italia, España y Arabia Saudita. Estados Unidos obtuvo del Líbano el beneficio de extraterritorialidad por su uso de la base de Hamate

Algunos aviones procedían directamente de Israel, pero debido a la falta de relaciones diplomáticas entre el Líbano y el Estado hebreo, estos aviones hicieron una breve escala en Chipre, en la base de soberanía británica de Akrotiri, antes de aterrizar en Beirut.

Un avión canadiense transportaba un lote de “silenciadores”. Un avión holandés con equipos de “interferencia electrónica” y un avión belga con bombas de humo. Material destinado más a la represión de manifestaciones que a la defensa del Líbano.

Francia incluso solicitó autorización para atracar un barco que transportaba 500 soldados y 50 vehículos blindados, pero la solicitud francesa fue rechazada.

El ejército libanés, lacónico, aseguró que este material estaba destinado a su uso personal y a las necesidades de la FPNUL (Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano), estacionada en la frontera libanés-israelí desde 2006, sin especificar, no obstante, la distribución de sus equipo.

Un toque adicional a este oscuro asunto es que el ejército libanés trasladó todos sus ejercicios militares aéreos y terrestres a Hamate (Norte del Líbano), lejos de la mirada del Hezbolá libanés, la formación chiita que paraliza a Israel y constituye la Insomniac de la OTAN.

Una propuesta de mandato británico para el Líbano

El Reino Unido, por su parte, pretende establecer un nuevo mandato sobre el Líbano, continuando su papel de desestabilización de este país durante la guerra siria, a través de sus ONG.

Utilizando como pretexto la guerra entre Israel y Hamás en Gaza, Londres presentó directamente al mando del ejército libanés –y no al gobierno libanés– un proyecto destinado a autorizar el despliegue y la protección de las fuerzas británicas en el Líbano.

Presentado antes de la operación Diluvio Al Aqsa, este proyecto se refiere a la protección de los buques de guerra británicos y de los aviones de la Royal Air Force, de los miembros de las fuerzas armadas británicas y de sus colaboradores locales, sin especificar su lugar de despliegue, ni el número de equipos ni su volumen. .

El documento especifica que el gobierno libanés no puede obstaculizar el libre movimiento de las fuerzas británicas ni en el espacio aéreo libanés ni en las aguas territoriales libanesas y recomienda que dé prioridad absoluta al acceso de las fuerzas británicas al espacio libanés y a las aguas territoriales de este país.

¿Está el Reino Unido, autor de la “promesa Balfour” que crea el “hogar nacional judío” en Palestina, considerando establecer un nuevo “hogar nacional” para cualquier minoría en territorio libanés con el fin de purgar las vilezas occidentales hacia un componente de su población? ¿En una nueva versión lejana de la promesa de Balfour?

Fuente: Madaniya.

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