Después de Venezuela, ¿por qué la prensa ignora a Chile y Ecuador?


A pesar de las promesas del presidente Piñera, la policía chilena continúa utilizando la violencia indiscriminada y detiene a los manifestantes. 
Santiago, Chile, 29 de octubre de 2019. Pablo Sanhueza

Los medios no se hacen eco de las protestas en Chile ni en Ecuador con la misma intensidad con la que trataron a Venezuela, alcanzando entonces su punto máximo a principios de este año. El hallazgo de Telesur proviene del comentario que el periodista del portal latinoamericano de CNN Carlos Montero dejó en su cuenta de Twitter el 22 de octubre.

Montero incluso cuestionó los titulares de los organismos internacionales, donde no hay referencias a las protestas populares y la represión que les ha estado causando en ambos países.

El periodista los compara con el tratamiento del New York Times de la violencia de los guarimbas , que la derecha venezolana llevó a cabo en 2017 con el objetivo de derrocar al presidente Nicolás Maduro, y que destacó en los titulares de la prensa norteamericana de amplia circulación.

Telesur dijo que, desde principios de enero de este año, The New York Times ha publicado más de 900 artículos sobre Venezuela, en su mayoría muy crítico con el gobierno de Maduro, utilizando la guerra semántica.

‘Dictador’ y ‘tirano’ fueron términos utilizados para designar al presidente electo, al tiempo que identificaban a los grupos violentos que atacaron a las fuerzas de seguridad con bombas molotov, piedras y armas de fuego como ‘activistas’ y ‘pacifistas’.

Por otro lado, Telesur recuerda que el apoyo de Estados Unidos al gobierno ecuatoriano y al presidente Moreno, con Mike Pompeo valorando “los esfuerzos […] para instituir prácticas democráticas e implementar reformas económicas”, no sucedió en Venezuela cuando sectores violentos intentaron desestabilizar al gobierno venezolano.

Fuente: www.abrilabril.pt

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Carlos Ríos

Vine al mundo en Granada en 1977. Soy licenciado en Geografía y trabajador en el sector de la enseñanza. Escribí "La identidad andaluza en el Flamenco" (Atrapasueños, 2009) y "La memoria desmontable, tres olvidados de la cultura andaluza" (El Bandolero, 2011) a dos manos. He hecho aportaciones a las obras colectivas "Desde Andalucía a América: 525 años de conquista y explotación de los pueblos" (Hojas Monfíes, 2017) y "Blas Infante: revolucionario andaluz" (Hojas Monfíes, 2019).

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