
El «motín del pan», también conocido como el «motín del hambre» es uno de los acontecimientos que marcaron la vida de Córdoba durante el siglo XVII. Se sitúa como parte de las conocidas «Alteraciones andaluzas» de mitad del siglo XVII, entre las que se encuentra el abortado plan independentista andaluz de 1641, abortado por Felipe IV.
La peste que había asolado Córdoba entre los años 1649 y 1650, unido al incremento de los precios en los productos básicos tras unas malas cosechas, había dejado muy maltrecho al pueblo de Córdoba. El 6 de mayo de 1652, como consecuencia de la muerte del hijo de una vecina del Barrio de San Lorenzo, debido a la terrible hambruna que padecía la ciudad, las clases populares cordobesas se echaron a la calle demandando comida. Felipe IV, conocedor de estos hechos y de la tensión social y política en Andalucía, envió a Córdoba 100.000 ducados para la compra de trigo con objeto de abaratar el precio del pan así como la concesión de un perdón general para los amotinados, calmando momentáneamente a la población cordobesa, que solo un mes más tarde -en junio- se volvería alzar.
SIGNIFICADO DEL MOTÍN DEL PAN Y LAS ALTERACIONES ANDALUZAS
Las “alteraciones andaluzas” fueron un episodio de revueltas que abarcaron, desde 1647 a 1652 (sólo unos años después del hecho al que dedicamos este trabajo), toda Andalucía. Desde Ayamonte hasta Velez Blanco pasando por Sevilla, Ayamonte, Sanlúcar de Barrameda, Palma del Río, Écija, Osuna, Córdoba, Ardales, Tarifa, Málaga, Loja, Lucena Bujalance, Luque, Montefrío, Alhama… Toda Andalucía se convulsionó. Y muy especialmente Granada. José Acosta Sánchez incluye la conjura independentista y las alteraciones andaluzas en el mismo bloque históricocxiii y establece un cuadro de factores de comprensión de las mismas:
- Las olas de hambre y penuria, basadas en la gran propiedad terrateniente dedicada al cultivo cerealista.
- La inflación monetaria galopante, que penalizaba a las clases populares e impedía la acumulación burguesa de capital.
- La presión fiscal de la Corona, directamente, sobre los impuestos a las ciudades e, indirectamente, a través de un aumento de la presión fiscal de la nobleza ante la disminución de sus rentas por la Corona.
Los hechos concretos acontecidos en la larga secuencia de rebeliones andaluzas de 1647 a 1652, ausentes de una verdadera organización y liderados por sectores de las clases populares, son reveladores si los ponemos en relación con la conjura independentista andaluza de 1641 en dos elementos: las conexiones internacionales asociadas en algunos casos a esas alteraciones y la aparición de un sector de las clases populares denominado como “morisco” en ambos casos.
En el «motín del pan» de Córdoba se atribuía la organización del mismo a la presencia de dos mil portugueses y se acusaba a los amotinados de tener tratos con el rey de Portugalcxv. Esta referencia está llena de significación: Portugal había proclamado su independencia como reino en diciembre de 1640. La orientación independentista (posible reminiscencia de la conjura de 1641) no puede ser más evidente.
Ese sector de las clases populares andaluzas denominado como “morisco” aparece en busca de alianzas contra la corona castellana. Y es que, a pesar de los decretos castellanos de expulsión, muchos moriscos permanecían y a ellos se les atribuye también buena parte de los planes en la sublevación granadina de 1648cxvi. Además, este primer motín granadino era liderado por Alonso Fernández de Mahandón -tintorero del Albaicín y morisco-, mientras que en los posteriores de Córdoba y Sevilla también se apuntaba al papel de los sederos y a su conexión con sederos granadinos, oficio y comercio de la seda en el que la minoría morisca seguía estando presente, aunque ocultaban su identidad bajo los nombres y apellidos castellanos que más habían sonado durante la conquista de Al Ándaluscxvii.
Fuentes: www.cordobapedia.wikanda.es / “Si el rey vive el reino muere”. La manipulación histórica sobre el plan independentista andaluz de 1641

Para una más amplia información ver el artículo sobre el artículo “8 de mayo de 1521: Motín del Pendón Verde”, en la sección de Memoria Andaluza.
Ulrike Marie Meinhof nació el 7 de octubre de 1934 (Oldenburg) y, como ha quedado dicho, murió el 9 de mayo de 1976 (Stuttgart). Inició su vida profesional como periodista. Fue una de las fundadoras de la Fracción del Ejército Rojo, también conocido como el grupo Baader-Meinhof, y solía utilizar los seudónimos de «Anna» y «Ranna». Meinhof realizó estudios de filosofía, pedagogía, sociología y alemán en la Universidad de Marburgo en 1955/56. En 1957, cambia de universidad y continúa sus estudios en la Universidad de Münster, en la que coincidió con Manuel Sacristán (quien tras su muerte traduciría y editaría una antología de sus escritos), y pasa a formar parte del Movimiento de Estudiantes Socialistas (Sozialistischer Deutschen Studentenbund).
Poco después se implicó en el movimiento antinuclear de su país apoyando dichas tesis desde su puesto como redactora de la revista política Konkret, vinculada a la izquierda radical. Se casó con Klaus Rainer Röhl, comunista, en 1961 y tuvo dos hijas gemelas, Bettina y Regine, el 21 de septiembre de 1962.
Divorciada en 1968, se unió entonces a grupos de izquierda más radicales en Berlín Occidental. En 1970, vista la ineficacia de los medios ordinarios de lucha empleados por la izquierda alemana, ayudó a Andreas Baader a escapar de prisión y después participó en robos a bancos y atentados con bomba contra fábricas y bases militares americanas. La prensa alemana denominó al grupo rápidamente «grupo de Baader-Meinhof». Meinhof escribió muchos de los ensayos y manifiestos que la banda produjo, enunciando el concepto de guerrilla urbana, utilizado para combatir lo que ella llamó la explotación del hombre común y el imperialismo del sistema del capitalista.
Capturada en 1972 en Langenhagen, fue condenada en audiencias preliminares a 8 años de encarcelamiento cautelar. Mientras se desarrollaba el juicio definitivo, en el que el fiscal pedía cadena perpetua para ella, la encontraron muerta en su celda el 9 de mayo de 1976 (aniversario de la derrota nazi en la Segunda Guerra Mundial), ahorcada colgada del techo. Los indicios de ejecución fueron tapados por los medios de desinformación masiva que hablaron de suicidio. Sus abogados negaron la versión oficial, pero no pudieron conseguir que hubiese juicio.
Su nombre fue expresamente mencionado como digno de agradecimiento y respeto en la declaración final de disolución de la Fracción del Ejército Rojo, datada en marzo de 1998 y recibida por varias agencias de prensa el 20 de abril de 1998

Un 9 de mayo de 1728 los tribunales de la Inquisición comienzan a dictar las sentencias en Granada contra 250 granadinas y granadinos que habían sido detenidos y procesados por islamizar. Los había denunciado ante la Inquisición Diego Díaz de Talavera (hijo de uno de los denunciados) y Luciana Chamizo (esposa de Diego Díaz). El primer auto de fe se realiza el 9 de mayo en la iglesia del convento de los Mercedarios Calzados a 48 granadinos. En los meses siguientes irían siendo juzgados por la Inquisición el resto de procesados. El último auto de fe se celebraría en 1731. A continuación reproducimos sus nombres y oficios según recoge Enrique Soria Mesa (2014).


Las carencias de Nerva. Distribución extraordinaria de Socorros, en la puerta del Círculo La Unión de Mineros, actual Sociedad Círculo Comercial, El Mercantil, en torno a 1900.



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