Arabia Saudí bombardea Yemen después de anunciar un alto el fuego

El miércoles, la coalición liderada por Arabia Saudita anunció que callaría las armas en Yemen, para apoyar los esfuerzos de las Naciones Unidas para poner fin a la guerra de agresión de cinco años y evitar la propagación de Covid-19.

El jueves, unas horas después del anuncio de este alto el fuego con supuestas intenciones humanitarias, los aviones de la coalición atacaron posiciones en varias regiones yemeníes, principalmente en las provincias de Sa’ada, Amran y al-Bayda, según la red de televisión estatal yemení al-Masirah .

Incluso antes de los ataques aéreos, el movimiento huti Ansarullah eliminó la importancia del anuncio de alto el fuego saudita, calificándolo como una oportunidad para que Riad abandone el “fango” en el que se encuentra, debido a los “repetidos fracasos” que enfrentan las fuerzas yemeníes, con un daño mínimo para los hutíes.

«Maniobra de los agresores», que quieren «salvar la cara»

En declaraciones a al-Mayadeen TV , Mohammed al-Bukhaiti, miembro del consejo político del movimiento Ansarullah, dijo que la medida anunciada por la coalición es más una “maniobra de los agresores” y una “estrategia para fortalecer y reorganizar sus filas”.

“Los sauditas han anunciado varios cese al fuego en Yemen, pero siempre los han violado”, subrayó al-Bukhaiti, subrayando que Riad está utilizando la pandemia de Covid-19 como “una oportunidad para salvar la cara y una salida” para la guerra.

Sin embargo, en su opinión, con el asedio todavía en curso en el país árabe, la guerra no terminará. “Si un alto el fuego no incluye el fin del bloqueo impuesto a Yemen, significa que la guerra de agresión saudí continuará”, dijo, citado por PressTV .

Las tropas yemeníes han intensificado recientemente los ataques de represalias contra Arabia Saudita y sus mercenarios, dentro y fuera del país, logrando recuperar algunas regiones estratégicas en las provincias de Jawf y Marib.

Cinco años de guerra de agresión

El 26 de marzo, pasaron cinco años sobre el inicio de la violenta campaña militar contra el pueblo yemení lanzada por Arabia Saudita, los Emiratos Árabes Unidos y una coalición de países árabes, en un intento por reprimir la resistencia del movimiento Ansarullah y volverlo a poner en el poder al ex-presidente Abd Rabbuh Mansur Hadi, un aliado de Riad.

La guerra de agresión, apoyada por Occidente, causó una gran destrucción en áreas residenciales y destruyó casi por completo las infraestructuras civiles del país, incluidos hospitales, escuelas, fábricas, sistemas de captación de agua y plantas de energía, sumergiéndola en lo que las Naciones Unidas Naciones Unidas se ubica como una de las peores crisis humanitarias de la historia.

En febrero pasado, Unicef ​​recordó nuevamente que “Yemen es un infierno para los niños”, ya que están particularmente afectados por el hambre y enfermedades como el cólera, la difteria, el sarampión y el dengue. Según las Naciones Unidas, un niño muere cada diez minutos en Yemen, un país donde, como resultado de la agresión militar, más de 22 millones de personas necesitan ayuda humanitaria y diez millones están “gravemente afectados por el hambre”.

Fuente: www.abrilabril.pt

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