Líbano: Las personas sin identificación no optan a las pruebas de coronavirus

Los hospitales libaneses han estado rechazando a los indocumentados o estableciendo precios prohibitivos para las pruebas de coronavirus, lo que hace temer a muchos por su salud, según un informe de Al Jazeera. Los refugiados y los trabajadores domésticos sin los documentos de identificación correctos han sido rechazados por los hospitales tanto para las pruebas como para el tratamiento.

Al Jazeera añadió que el personal del Hospital Universitario Rafic Hariri (RHUH) confirmó que su política es rechazar a las personas indocumentadas siempre que no necesiten atención de emergencia. Según una fuente del hospital, “debemos proporcionar al estado el nombre de cualquier persona a la que hagamos la prueba, para que si es positiva podamos informar tanto al estado como a la persona”. No podemos hacerlo sin un nombre”. Sin embargo, la fuente añadió: “Para que quede muy claro, cualquier persona que acuda a nosotros en una situación de emergencia y necesite tratamiento, se le dará tratamiento, pero si no es un caso de emergencia no podemos”.

Algunas trabajadoras domésticas migrantes no pueden presentar documentos de identificación porque sus empleadores les confiscan los pasaportes cuando entran en el país. Esta práctica forma parte del sistema de patrocinio de la migración – “kafala”- que vincula la residencia legal con el empleo pero no concede a los trabajadores cobertura sanitaria.

A los que quieren hacerse la prueba pero no necesitan atención de emergencia, se les dice que deben pagar hasta 750.000 liras libanesas (aproximadamente 498 dólares) para cubrir el costo del procedimiento. Este precio no sólo es prohibitivo para los trabajadores migrantes, sino también para los casi 1,5 millones de refugiados en el país y los miles de libaneses que viven mano a mano. Muchos de ellos están desempleados como resultado del brote de coronavirus, incluso antes de que miles de personas estuvieran luchando para hacer frente al aumento del costo de la vida. El Banco Mundial ha advertido que la peor crisis económica del Líbano desde el final de la guerra civil en 1990 amenaza con empujar a más del 45% de la población por debajo del umbral de pobreza.

Los temores a que un brote de coronavirus en los 12 campamentos de refugiados palestinos administrados por las Naciones Unidas en el país pudiera ser catastrófico han acaparado los titulares, y varios han dicho que una distribución de jabón y productos de higiene por parte del ACNUR no es suficiente para combatir la propagación de la enfermedad.

Según un informe de Al Arabiya, un grupo de residentes del campamento Mar Elias de Beirut se ha encargado de la vigilancia comunitaria y ha formado un comité de emergencia de voluntarios. El grupo ha distribuido a los residentes productos de higiene, incluido un aerosol desinfectante. Otros miembros han vigilado las entradas del campamento y han disuelto las reuniones en un esfuerzo por adherirse al bloqueo nacional.

Hasta la fecha, el Ministerio de Salud del Líbano ha comunicado 446 casos confirmados de infección y 11 muertes por el virus.

Fuente: www.monitordeoriente.com

También te podría gustar...

1 respuesta

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *