Condenan sanciones canadienses contra la prensa iraní

La red comunicacional panárabe consideró de fallida e imprudente las sanciones canadienses contra los medios y periodistas iraníes.

El canal panárabe Al Mayadeen ve con gran asombro y sospecha la decisión de las autoridades canadienses de imponer sanciones a los medios y periodistas iraníes, con pretextos diferentes y endebles, señaló Ghassan Ben Jeddou, Presidente del Consejo de Dirección, por medio de un comunicado.

La red manifestó su rechazo al principio de imponer sanciones de cualquier tipo, y lo considera una opción fallida, temeraria e inútil. Agregó que la venganza a través de las sanciones sólo expresa debilidad y no fuerza.

En ese sentido, Al Mayadeen expresó su solidaridad con la televisión iraní y los corresponsales, periódicos, agencias y todos aquellos que trabajan en el campo de los medios en la República Islámica.

También enfatizó que las sanciones actuales a los medios iraníes fracasarán inevitablemente. 

En su comunicado, la cadena recordó las sanciones contra los medios rusos. 

Al respecto, apuntó que lo sucedido con los medios rusos –en términos de exclusión y sanciones– confirma el fracaso del curso de esa política y contradice las reglas más básicas de los medios profesionales y el respeto por la libertad de prensa.

Al Mayadeen expresó que algunos países y organizaciones lidian con desconcertantes dobles raseros con los medios internacionales, que oscurecen los hechos en la Palestina ocupada, donde la máquina asesina de la ocupación israelí continúa atacando al pueblo palestino a diario.

Al término de su declaración, Al Mayadeen pidió a los medios de comunicación libres del mundo que declaren su solidaridad con los colegas periodistas en Irán y afirmen posiciones que rechacen las injustas políticas de sanciones.

Con anterioridad, Canadá impuso sanciones a los medios y periodistas iraníes, bajo el pretexto de su participación en la violación de los “derechos humanos”.

La locura de las sanciones contra Irán se convierte en un virus

La locura de las sanciones impuestas por la administración estadounidense se convierte en un “virus” que se transmite rápidamente a sus amigos, declaró el Ministerio de Relaciones Exteriores iraní al responder a las medidas canadienses adoptadas contra los medios y periodistas en Irán.

El portavoz de la cancillería, Nasser Kanaani, puntualizó que Canadá se torna adicto al comportamiento racista.

“Las fosas comunes de su población aborigen son la mejor prueba de ello, y ahora recurre al racismo mediático”, subrayó.

Kanaani explicó que la imposición de sanciones a las agencias de noticias Tasnim, Fars, Noor News y al diario Kayhan, y además al actual presidente y exjefe de la Corporación de Radio y Televisión de Irán y uno de sus corresponsales, representa la última lista canadiense de sanciones contra Irán.

El diplomático indicó que esta no es la primera sanción que impone Canadá a los medios iraníes. En el pasado también dictó medidas al canal Press TV en idioma inglés.

“Desde el punto de vista de Canadá y sus aliados occidentales, además de las sanciones económicas, el pueblo iraní tampoco tiene derecho a expresar su opinión, a menos que hable como ellos o en su idioma, como lo hacen los dos canales de oposición de habla persa Iran International y Manu To”, añadió.

Kanaani subrayó que imponer sanciones a los medios y periodistas en Irán es una violación a los principales derechos del pueblo iraní de llevar su voz al mundo. También refleja que la consigna de libertad de expresión enarbolada por Occidente es un eslogan vacío.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán anunció su decisión imponer sanciones a varios actores influyentes en la imposición de penalidades al pueblo iraní, así como a algunas instituciones y organizaciones que apoyan el caos y la desestabilización de la seguridad en la República Islámica.

Fuente: espanol.almayadeen.net