Biden autoriza a Ucrania a usar misiles de largo alcance de EEUU en suelo de Rusia: ¿Qué implicaciones tendrá la decisión?
El presidente Joe Biden ha autorizado a Ucrania el uso de armas estadounidenses de largo alcance para ataques limitados dentro de territorio ruso, asegura hoy el diario The Washington Post citando a dos altos funcionarios del gobierno de Biden. También The New York Times habría publicado esta información. Hasta el momento, ni la Casa Blanca ni el Pentágono lo han confirmado. Tampoco lo ha hecho el gobierno ucraniano de Volodímir Zelenski.
Según las fuentes que cita el diario, el permiso de Biden pasa usar las armas estadounidenses es en respuesta al envío a Ucrania de miles de soldados norcoreanos (10.000 según el espionaje estadounidense) para sumarse a las fuerzas rusas que tratan de retomar el control del territorio ruso capturado por las tropas ucranianas en la región de Kursk.
Las armas autorizadas son concretamente misiles supersónicos guiados llamados ATACMS que pueden transportar cabezas convencionales o de racimo, y tienen un alcance de unas 190 millas o 300 kilómetros.
Responden a lo que el gobierno de Zelenski lleva pidiendo meses con el argumento de que solo armas así pueden degradar la capacidad militar rusa significativamente y dar a Ucrania una cierta ventaja sobre el terreno.
¿Qué implicaciones tendrá la anunciada decisión de Biden de permitir el uso de misiles en Rusia?
La Casa Blanca habría dado la luz verde para que Kiev pueda utilizar misiles de largo alcance para atacar territorio ruso, de acuerdo a un reporte del medio estadounidense ‘The New York Times‘ publicado este 17 de noviembre. ¿Qué implicaciones tendría la decisión del mandatario saliente?
Según la información del medio estadounidense, que todavía no ha sido confirmado ni por la Casa Blanca ni por el Pentágono, el Gobierno del saliente presidente Joe Biden habría dado el visto bueno a Kiev para permitirle el uso de los llamados Sistemas de Misiles Tácticos del Ejército, o ATACM, para atacar territorio ruso.
El presidente Vladímir Putin advirtió en septiembre que tal escenario significaría que los países de la OTAN estaban participando de manera directa en un combate con Rusia.
El anuncio ocurre luego de meses de insistencia desde Kiev a Washington para permitir el uso de estos misiles, en medio de un contexto cada vez más dramático para el bando ucraniano en el terreno de batalla.
Vale recordar que, a comienzos de este año, la Casa Blanca —que se había negado a enviar estos misiles a Kiev desde el comienzo del conflicto— transfirió finalmente el armamento a Kiev, con la condición de que solo se usaran dentro del territorio ucraniano.
Regalo de Navidad anticipado
Según Samuel Losada, internacionalista argentino egresado de la Universidad de Belgrano, con este viraje, Biden pretendería bloquear o dificultar la propuesta de Trump de buscar finalizar el conflicto de Ucrania y que las partes se sienten a negociar.
“Armar todavía más a Ucrania y levantarle el bloqueo con respecto a lanzar misiles de largo alcance en Rusia podría generar una escalada del conflicto, al menos en el corto tiempo, haciendo que los ánimos sean menos propicios todavía para negociar en estos próximos meses”, afirma el experto.
En ese sentido, Losada indica que el cambio de postura “confirma el tenor belicista e injerencista de la política exterior del Gobierno de Joe Biden, pese a que hace menos de dos semanas la propia ciudadanía votó en contra de esto al elegir como nuevo presidente a Donald Trump, que hizo campaña prometiendo terminar con los conflictos internacionales financiados por Washington y quien ha sido muy crítico de Zelenski, así como también del envío por parte de la Administración Biden de fondos prácticamente ilimitados a Kiev”, ahondó el experto.
Al respecto, señala que la decisión de Biden, a quien solo le queda dos meses en el poder y sabe que debe actuar rápido, “ratifica que las élites occidentales le dan la espalda a los votantes, y que siempre van a elegir continuar financiando al complejo industrial militar”.
Añadió que el propio secretario de Defensa de Biden, el general Lloyd Austin, fue hasta su designación miembro de la junta directiva de Raytheon Technologies, la empresa fabricante de armas que es el principal contratista militar de EEUU.
Por su parte, el doctor mexicano Moisés Garduno, internacionalista por la Universidad Nacional Autónoma de México, consideró que con esta decisión, la Administración Biden “le envía un regalo de Navidad anticipado”, a la de Trump.
“Se trata de una provocación para obligar a Trump a dialogar con el complejo militar-industrial estadounidense sobre la ruta económica que seguirá”, dijo el experto en alusión a un posible fin del conflicto en Ucrania que el presidente electo de EEUU promovió en campaña.
“Irresponsabilidad manifiesta”
El analista argentino Jorge Elbaum, sociólogo y doctor en Ciencias Políticas por la Universidad de Buenos Aires, dijo para Sputnik que esta decisión era una “irresponsabilidad manifiesta”, cuyo fin es presionar a la próxima Administración de Donald Trump a continuar el conflicto en Ucrania.
“La decisión de Biden parece dar por descontada la inminente derrota de Ucrania y los países de la OTAN contra la Federación de Rusia, queriendo en estos últimos meses, antes de la asunción de Donald Trump, que Rusia asuma de alguna manera la respuesta a esta provocación, generándose una situación de peligro de escalamiento, incluso nuclear, que tendría como principales víctimas sin duda a las capitales de los países de la OTAN”, consideró el experto.
Por otra parte, David García Contreras, internacionalista mexicano por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), consideró para Sputnik que la autorización “es el último esfuerzo desesperado para dar fuerza a la posición ucraniana”.
“Lo único que quieren es fortalecerla (a Ucrania) con esta medida previa a la llegada de (Donald) Trump, que no garantizaría el apoyo a Ucrania y que ya ha hablado de resolver el conflicto”, señaló el especialista.
En septiembre de este año, el presidente ruso, Vladímir Putin, lanzó una advertencia a EEUU y Europa sobre este escenario durante un discurso en la ciudad de San Petersburgo.
“Cambiaría sustancialmente la esencia misma, la naturaleza del conflicto”, sentenció Putin, agregando que si Ucrania llega a utilizar misiles de largo alcance fabricados en EEUU en territorio ruso, esto implicaría que los países de la OTAN “están combatiendo con Rusia”.
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