El juez envía a 45 policías españoles a juicio por las cargas del 1-O a Barcelona

El juez que investiga las cargas de la policía española durante el referéndum del 1-O en Barcelona ha cerrado la instrucción y ha decidido enviar cuarenta y cinco agentes a juicio, según ha confirmado el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya. Asimismo, deja la puerta abierta para que los afectados por las intervenciones puedan acusarles no sólo de lesiones, sino también de torturas. El cierre de la instrucción se produce cinco años después de los hechos y pese a los intentos de la fiscalía de boicotear la causa. De hecho, logró que se expulsara al Ayuntamiento de Barcelona, ​​que ejercía como acusación particular.

La investigación del magistrado Francisco Miralles, realizada a raíz de las denuncias como acusación de Irídia, Òmnium y el ANC, se ha focalizado en los agentes y los mandos que actuaron en las calles, pero ha evitado señalar las altas instancias de la policía y del Ministerio del Interior. En este sentido, considera que no se ha probado que se dieran órdenes de actuar en contra de los votantes. Por otra parte, ha archivado el procedimiento contra veinte agentes.

En el auto, el juez instructor describe la actuación de algunos agentes como “claramente desproporcionada” y censura su intervención, como los hechos ocurridos en el IES Pau Claris: “No resulta compatible con ningún criterio de proporcionalidad que los agentes golpeen en la cara a las personas congregadas o que las tiren escaleras abajo, cayendo sobre otras personas que están sentadas o sobre los escalones, con el grave riesgo que esto supone para la integridad de los ciudadanos”.

A partir de ahora, Miralles ha dado cuarenta días a la fiscalía -en el 2019 pidió el archivo de la causa, excepto por sólo seis agentes- ya las acusaciones que representan a los heridos para que presenten los escritos de acusación en contra de los cuarenta -cinco agentes.

Fuente: Vilaweb.