SER VENCIDO EN LA BATALLA NO ES ESTAR DERROTADO, ES SIMPLEMENTE HABER TENIDO EL CORAJE DE LUCHAR.

Morir en la batalla es vivir para siempre.

Ayer 13 de agosto se cumplieron estas dos máximas en el Homenaje a Javier Verdejo Lucas.
40 años del asesinato de un joven que reclama “pan trabajo y libertad” para un pueblo oprimido por el fascismo. Aún hoy los asesinos siguen libres e impunes.

¡¡¡¡SABEMOS QUIENES FUERON!!!
¡¡¡SABEMOS QUIEN FUE!!!……

El estado represor que tras gobiernos de diversas ideologías políticas ( eso dicen) no ha entregado a los culpables.

No obstante se cumplieron las dos máximas:

Ayer 13 de agosto, la plaza Miguel Naveros, cerca del lugar de su asesinato, se llenaba de guerreros y guerreras,
De compañeras y compañeros en la lucha, rebeldes que mantienen viva su memoria en el recuerdo de sus escaramuzas nocturnas y manifestaciones con Javier.

De familiares que niegan bajar el brazo ante crímenes endémicos (Luis Cobos, Luis Montero, Juan Mañas.)
De compañeras y compañeros que lo conocieron y que no lo conocimos….

Todos y todas impregnados del germen de la lucha contra la opresión del pueblo.

Alrededor de 250 personas con el brillo en los ojos de saberse vivos, saberse fuertes, de saberse vencedores a la derrota, se reunieron allí ante nuestro compañero Javier.

“ QUIEN MUERE EN LA BATALLA VIVE PARA SIEMPRE”

La semilla sigue viva y se extiende fructífera.

El estado capitalista lo sabe y la teme, la contiene (eso cree) enviando a su ejército represor.
No habrá provocación que nos haga saltar. Hay un movimiento medido, calmado pensado y organizado que destruirá al capitalismo y la desigualdad entre los pueblos.

Se palpó la noche del 13 de agosto.

¡¡¡¡¡ HASTA EL DUENDE SE VISTIÓ DE ROJO!!!!

Grandes artistas nos deslumbraron con su arte y nos sorprendieron con su compromiso.

El torrente de El Niño de las Cuevas por verdiales y rondeñas compuestas por él para la ocasión.

El embrujo de la cantaora Ana Mar que supo dar sentido al tema de Domingo Nicolás y Sorroche “ En la brisa huyendo” dedicado a Javier.

La fusión de danza y cante de María Molina Laluna.

Zalú Javier “ la muerte buscada por la heroicidad de la vida” Blas Infante

Rafael Lorente para La Otra Andalucía