“No a la excarcelación de los condenados por el caso ERE. Debemos exigir a los juzgados que recuperen los 680 millones € robados”

Griñán y Chaves, expresidentes de la Junta, fueron condenados a seis años de cárcel y a nueve de inhabilitación respectivamente.

El caso ERE ha vuelto desde hace algunas semanas a la palestra por la excarcelación de Miguel Ángel Serrano, ex director general del antiguo Instituto de Fomento de Andalucía. Este es el primero pero seguramente no será el último.

El partido de izquierda independentista Nación Andaluza ha emitido una nota de prensa en la que “rechaza la excarcelación”. Y afirman que “hemos visto con estupor como de 134 procedimientos judiciales abierto solo se han juzgado y sentenciado 17”.

La tesis que defiende el Tribunal Constitucional es que si hay una ley -los Presupuestos de Andalucía en este caso- quienes ejecutan lo recogido en esa ley no pueden ser condenados por malversación. Desde el Secretariado Permanente de Nación Andaluza señalan varios factores de este caso como un “escándalo” que “de 680 millones de euros de dinero público defraudados se hayan recuperado menos de 12″o “que aún queden 117 actuaciones judiciales pendientes de juicio y sentencia” entre otros elementos.

Para la formación independentista “el caso ERE pone de manifiesto como a través de las subvenciones y la tan cacareada colaboración público-privada hay una masiva transferencia de dinero público al sector privado con un control muy laxo. Una laxitud que contrasta con el acoso administrativo que rige la concesión de ayudas sociales, por ejemplo el Ingreso Mínimo Vital. El capitalismo no tiene bastante con explotar a la clase trabajadora a día de hoy, conseguir subvenciones y contratas públicas está en la agenda de todas las empresas junto a todo tipo de ingenierías financieras para elevar las tasas de ganancia”.

En cuanto a la corrupción señalan que “no se corresponde con actitudes individuales sino con una manifestación de los gobiernos oligárquicos del PSOE en Andalucía (sostenido por distintas muletas políticas) que ha aplicado políticas neoliberales y extractivas e instaurado una paz social ventajosa para la burguesía” y apuntan a que de “Moreno Bonilla (PP) no esperamos resultados distintos puesto que está aplicando el mismo modelo”.

En cuanto fenómenos de largo recorrido apuntan a que “al Estado español, al gobierno manijero de la Junta y a la burguesía que lo sostiene le interesa una Andalucía narcotizada y alienada. Para ello han desplegado multitud de maneras distintas de corrupción; unas veces ajustadas a la legalidad y otras no. En este último caso lo denominamos corrupción pero todas ellas son antidemocráticas puesto que violan el derecho a autogobernarse del Pueblo Andaluz”.

“La corrupción es inherente a la opresión de Andalucía. Una opresión que se plasma en una alta desigualdad social, una renta per cápita que no supera el 75% de la media estatal, desempleo estructural, precariedad laboral… Es el necesario lubricante que facilita el funcionamiento del capitalismo y que suaviza las contradicciones entre los ritmos parlamentarios, las leyes que aún no se han adecuado a las necesidades de la burguesía y la creciente necesidad capitalista de aumentar sus tasas de ganancia”.

Nación Andaluza concluye afirmando que “no confía en la neutralidad de la judicatura española para arrojar luz sobre la corrupción profunda que el Estado español necesita desplegar en Andalucía para gobernarnos”. “El pueblo trabajador andaluz debemos exigir a los juzgados que se pongan las pilas para recuperar el dinero robado y que todo lo que se recupere se devuelva a la Junta para que lo invierta única y exclusivamente en políticas sociales”.

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Francisco Vílchez

Andaluz de Granada (1980). Grado en Humanidades en la UGR. Pluriempleado en el sector servicios y aficionado a hablar de lo que la prensa no dice ni pío.

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