Euskal Herría: Manifestación alternativa de Amnistía Ta Askatasuna por los presos vascos

Un millar de manifestantes acudieron a la convocatoria del movimiento por la Amnistía y contra la Represión de los presos vascos

Mil personas con banderas vascas y las del símbolo que representa la lucha por la Amnistía, ganaron las calles céntricas de Bilbao en medio de la fiesta grande de esta importante ciudad vasca.

Los manifestantes convocados por el Movimiento por la Amnistía y contra la Represión, Amistía Ta Askatasuna (ATA), no sólo exigieron la libertad de los militantes vascos y vascas sino que también recordaron que varios de ellos se encuentran en huelga de hambre en las cárceles de exterminio españolas y francesas. Abogaron para que cese la dispersión y señalaron enfáticamente que los prisioneros “no son terroristas” sino gudaris (combatientes)

En el acto final, se leyó una carta de dos ex presos políticos irlandeses, LIAM McCOTTER y PÁDRAIC MAC COITIR, en la que se expresa:

Como expresos republicanos irlandeses, queremos ofrecer de todo corazón nuestro apoyo y nuestra más firme solidaridad a todos los presos políticos vascos, especialmente a aquellos que han sido forzados a embarcarse en una huelga de hambre como método de último recurso. Hace 35 años, diez de nuestros valientes compañeros murieron tras una huelga de hambre en Longkesh, en su persecución de ser reconocidos como presos políticos.

También extendemos nuestro apoyo y solidaridad a los familiares de los presos y al recientemente establecido Movimiento Pro Amnistía, por priorizar y asegurar la puesta en libertad inmediata y sin condiciones de estos presos.

A pesar del cese definitivo de la lucha armada, estos presos siguen languideciendo en cárceles del Estado español, Estado francés y Euskal Herria y continúan sufriendo un trato intolerable, degradante e inhumano.

Elogiamos al movimiento Pro Amnistía por su entereza en resaltar la situación de estos prisioneros y por exigir su inmediata e incondicional puesta en libertad, a pesar de la represión política, de las artimañas y de los pretextos.

Hacemos un llamamiento a todos los vascos honestos para que apoyen esta campaña.

Luego un vocero del Movimiento por la Amnistía y contra la Represión expresó:

En estos tiempos en los que el enemigo trata de que nos traguemos por todos los medios esa gran mentira a la que llaman normalización, consistente en hacer normal la represión, consistente en tenernos con la boca cerrada bajo la amenaza de que también podría ser peor de lo que es, tenemos que decir que no, que en Euskal Herria todavía son tiempos de lucha porque seguimos siendo un pueblo al que dos estados imperialistas niegan por la fuerza su derecho a ser libre, y más aun cuando centenares de hijos e hijas de este pueblo permanecen en prisión, en el exilio o en la deportación.

Que vivamos en un pequeño país hace que a veces perdamos la perspectiva del tiempo. Hace sólo un año que en estas mismas fechas y haciendo el mismo recorrido que hoy se celebraba la primera manifestación en 8 años a favor de la amnistía. 8 años de sequía reivindicativa a la que nuestro movimiento puso fin. Un año después, plagado de iniciativas por la amnistía, incluso quienes decían que lo que defendíamos era una utopía han acabado poniendo la palabra amnistía en las pancartas de sus manifestaciones. Son pequeños gestos que nos demuestran que el camino se hace andando. Seguiremos caminando hasta que podamos llevar esta lucha adelante como pueblo, y no como un pequeño sector de éste.

Hace un año también dijimos que no sería fácil pero que merecería la pena, exactamente que iba a merecer la pena defender que no son terroristas quienes hoy siguen sufriendo la represión de dos estados que durante siglos no han parado de vulnerar derechos humanos a lo largo y ancho de todo el mundo, sino personas que han dado lo mejor de sí mismas para hacer frente a estos dos monstruos que se alimentan del sudor y la sangre de la clase trabajadora de Euskal Herria.

Por decir esto fuimos detenidos, pero lo decimos otra vez, merece la pena. Y por eso hoy volvemos a decir que los represaliados políticos no son terroristas, que al contrario que Urquijo, que vive a todo lujo por ser el chivato de la clase, son personas que están dando lo mejor de sus vidas en celdas de 10 metros cuadrados por hacer frente a esos dos estados, que también repetimos, son monstruos que se alimentan del sudor y la sangre de la clase trabajadora de los pueblos, entre ellos Euskal Herria. Urquijo, fascista, si estas apuntando toma nota: no vamos a dar ni un paso atrás! Preso, iheslari eta deportatuak etxera! Amnistia osoa!

(Fuente: Resumen Latinoamericano)

Francisco Campos

Francisco Campos

Nació en Sevilla en 21 de julio de 1958. Trabaja como administrativo. Es autor del libro "La Constitución andaluza de Antequera: su importancia y actualidad" (Hojas Monfíes, 2017).

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